Hola amig@s!
Hace unos meses os enseñé a hacer unos patucos “modernos”, ¿os acordais?
Hoy
voy a enseñaros a hacer otro modelo. Que, aunque parecen muy diferentes, en
realidad se tejen de forma muy parecida.
Estos
zapatitos tienen una historia detrás que me gustaría contaros: Hace ahora casi
un año nació una niña llamada Claudia. Y nació muy, muy pequeña, apenas pesaba
500 gramitos. Pero no os engañeis, todo lo que tenía de pequeña lo tenía de
luchadora y decidió que quería vivir. Así que tras muchos avatares, pasitos
adelante y también algún pasito para atrás, logró ¡por fin! salir del hospital.
Ahora es una bebé preciosa y, aunque todavía sus piececitos no llenan estos
zapatos, seguro que muy pronto le valdrán.
Mis
amas los tejieron para ella como regalo y decidieron hacerlos en rojo porque es
el color de la suerte, un color que transmite energía, fuerza y positividad…¡los
zapatitos de Claudia no podían ser de otro color!
Espero
que os hayan gustado y por si os animéis a hacer vuestra propia versión, aquí
os dejo las instrucciones.
Y, como hago últimamente, enlazo esta entrada con la fiesta de enlaces del blog Personalización de blogs.